Las haciendas mexicanas son lugares fascinantes, que combinan en si, muchos atractivos turísticos. De inicio, son vestigios de importantes épocas históricas de las regiones donde se levantan. Al mismo tiempo son caudales inagotables de referencias sociales, artísticas y culturales. Al haberse convertido muchas de ellas en hoteles de lujo, como es el caso de la