La Hacienda de San Antonio del Coyote, ubicada en el ejido El Fénix del municipio…

En el corazón del estado de Guanajuato, donde la historia nacional se entrelaza con la tradición agrícola y el esplendor arquitectónico, se encuentra la Hacienda Santa Ana y Lobos, una joya patrimonial que ha perdurado a través de los siglos. Ubicada en el municipio de San Luis de la Paz, esta majestuosa propiedad se ha consolidado como uno de los escenarios más cautivadores del Bajío para la celebración de bodas, eventos empresariales y encuentros culturales.
Más que una simple finca antigua, es un testimonio vivo del México virreinal y de las transformaciones sociales que ha experimentado el país a lo largo del tiempo.
Una historia que inicia en el siglo XVII
La fundación de la Hacienda Santa Ana y Lobos se remonta a las primeras décadas del siglo XVII, específicamente entre los años 1600 y 1660. Su primer propietario, Juan Francisco de Goñi y Peralta, fue uno de los grandes benefactores de la Compañía de Jesús, lo que convirtió a la hacienda en un punto de apoyo para la presencia jesuita en la región.
Durante los siglos XVII y XVIII, la propiedad vivió su auge, destacándose como un importante centro agropecuario y vinícola. La crianza de ganado de engorda y de lidia, así como la producción de vino, fueron pilares de su economía. Sin embargo, en 1767, con la expulsión de los jesuitas del virreinato de la Nueva España, la hacienda fue confiscada por el gobierno virreinal y puesta en venta. En 1779, fue adquirida por Don Diego de Zubieta, integrándose a las propiedades del Colegio de San Luis de la Paz.
Con el paso del tiempo, la hacienda fue cambiando de propietarios. Uno de los más destacados fue Francisco de Paula José María Zacarías Rubio de Tejada y Álvarez del Condarco, cuya familia jugó un papel fundamental en la industrialización de México, particularmente en Querétaro, con la famosa Fábrica de Hércules.
La hacienda también presenció momentos significativos de la historia nacional. En 1814, durante la Guerra de Independencia, el padre José María Cos pronunció en su capilla un famoso sermón a favor del movimiento insurgente, convirtiendo al recinto en un símbolo de la lucha por la libertad.
Patrimonio artístico y cultural
Durante el Porfiriato, la hacienda experimentó una etapa de embellecimiento al estilo europeo. Francisco Paula y Rubio trajo esculturas de bronce desde Europa, entre las que destacaban un par de toros de lidia y una figura de la musa griega Polimnia. Estas piezas fueron posteriormente donadas, una a la ciudad de Querétaro (el toro) y otra a San Luis de la Paz (la musa), donde hoy forman parte del patrimonio escultórico urbano.
El casco de la hacienda conserva la esencia arquitectónica del periodo virreinal, con arcos de medio punto, patios empedrados, muros de adobe y techos altos de vigas de madera, lo que genera un ambiente de auténtico viaje al pasado. Este entorno es ideal tanto para los amantes de la historia como para quienes buscan un escenario espectacular para eventos especiales.
Instalaciones adaptadas para eventos contemporáneos
Actualmente, la Hacienda Santa Ana y Lobos ha sido adaptada para recibir eventos de todo tipo sin perder su esencia histórica. Sus amplios jardines, salones interiores, terraza panorámica, capilla consagrada y áreas de hospedaje permiten organizar bodas, retiros empresariales, conciertos, rodajes cinematográficos y reuniones familiares en un entorno de privacidad, elegancia y contacto con la historia.
Los espacios disponibles incluyen:
Jardines y explanadas con capacidad para hasta 2,500 personas.
Salones interiores que conservan elementos originales y son ideales para eventos más íntimos.
Capilla consagrada, perfecta para ceremonias religiosas en un ambiente solemne y cargado de historia.
Terraza con vista al paisaje campestre, ideal para recepciones al atardecer.
Cocinas para catering profesional que permiten un servicio gastronómico de alta calidad.
Estacionamiento amplio para comodidad de los asistentes.
Caballerizas y corredores techados, útiles también para producciones audiovisuales o actividades ecuestres.
Además, la hacienda ofrece 7 habitaciones dobles y 5 suites equipadas con mobiliario de época, conservando un ambiente de serenidad y confort para los huéspedes que desean vivir la experiencia completa del lugar.
Servicios personalizados y flexibilidad
Una de las principales fortalezas de la Hacienda Santa Ana y Lobos es la atención personalizada. El equipo de coordinación de eventos ofrece apoyo logístico, asesoría y soluciones a medida, permitiendo a los organizadores diseñar celebraciones únicas. No existen restricciones de horario, lo que brinda mayor libertad a quienes buscan eventos prolongados. Además, la hacienda permite trabajar con proveedores externos, lo que otorga versatilidad en la elección de banqueteros, decoradores, fotógrafos y músicos.
Ubicación y contacto
La Hacienda Santa Ana y Lobos se ubica en el Casco de Hacienda, Ejido Santa Ana y Lobos, C.P. 37880, San Luis de la Paz, Guanajuato. Este municipio forma parte de la región noreste del estado, a una distancia accesible desde San Miguel de Allende, Dolores Hidalgo y Querétaro, lo que facilita la llegada de invitados nacionales e internacionales.
Datos de contacto:
Teléfono: 446 138 1680
Correo electrónico: hola@haciendasantaanaylobos.mx
Sitio web: www.haciendasantaanaylobos.mx
Un legado que vive
Más que una construcción antigua, la Hacienda Santa Ana y Lobos representa un puente entre el pasado y el presente. Su valor patrimonial, su arquitectura bien conservada y sus servicios adaptados a las necesidades actuales hacen de este lugar un destino inigualable en el centro del país. Ya sea para celebrar una boda, vivir una experiencia histórica o simplemente disfrutar de la tranquilidad del campo guanajuatense, esta hacienda ofrece una vivencia auténtica y memorable.
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