Skip to content

Ubicada en el municipio de Comalcalco, Tabasco, la Hacienda La Chonita es una joya viva de la historia agrícola del sureste mexicano.

Esta finca, que data del siglo XIX, se encuentra a solo 10 kilómetros de la zona arqueológica de Comalcalco y a menos de una hora de Villahermosa, lo que la convierte en una excelente escapada para los viajeros interesados en el cacao, la cultura maya-chontal y el turismo rural.

Para llegar, basta tomar la carretera Villahermosa–Comalcalco y seguir las indicaciones hacia Cupilco; desde ahí, un desvío de unos pocos kilómetros conduce hasta la entrada de la hacienda, inmersa en un entorno natural exuberante donde los árboles de cacao, los caobas y los zapotes envuelven el ambiente con su sombra y frescura.

Historia y transformación de la hacienda

La Chonita nació como una plantación tradicional de cacao y ha sabido reinventarse sin perder sus raíces. Conserva buena parte de su arquitectura original: techos de teja, amplios corredores, paredes de ladrillo rojo y un aire señorial que recuerda su pasado próspero durante los siglos XIX y XX.

Durante décadas, la hacienda funcionó como centro de producción agrícola, pero con el paso del tiempo, sus propietarios apostaron por una reconversión agroecológica y turística que la mantiene viva en la actualidad. Hoy, La Chonita no es solo una finca productiva, sino también un centro de interpretación cultural y ecológica.

La experiencia del visitante

Uno de los grandes atractivos de la Hacienda La Chonita es su enfoque en el turismo vivencial. Aquí no se trata solo de observar, sino de participar.

Los visitantes pueden recorrer los cacaotales, conocer el proceso artesanal de producción del chocolate desde la semilla hasta la barra, y degustar el fruto del cacao en sus diferentes formas: fresco, fermentado, molido o convertido en bebida espumosa al estilo prehispánico.

Además, se imparten talleres de elaboración de chocolate y se ofrecen visitas guiadas por el casco antiguo de la hacienda, donde se narran anécdotas familiares, datos históricos y técnicas agrícolas tradicionales.

Turismo sostenible y agroecología

La Chonita es un ejemplo destacado de producción agroecológica. La hacienda practica un modelo de agricultura regenerativa que respeta los ciclos naturales del cacao y fomenta la biodiversidad.

Se utilizan fertilizantes orgánicos, técnicas de cultivo intercalado y conservación de especies nativas, lo que la convierte en un laboratorio vivo de sostenibilidad.

Para quienes desean profundizar en estos temas, se ofrecen recorridos educativos sobre agroecología, prácticas sustentables y conservación del medio ambiente. Esta visión integral ha convertido a La Chonita en un referente entre las haciendas cacaoteras de Tabasco.

Cultura, tradiciones y entorno

Además del cacao, la hacienda mantiene viva la cultura tabasqueña a través de su gastronomía, artesanía y actividades tradicionales.

En su restaurante se pueden degustar platillos locales como el pejelagarto asado, tamales de chipilín, puchero tabasqueño y bebidas a base de cacao.

También se pueden adquirir productos hechos a mano por artesanos locales, como figuras de barro, textiles bordados y jabones elaborados con ingredientes naturales.

La cercanía de la hacienda con la zona arqueológica de Comalcalco permite complementar la experiencia con un recorrido por las únicas ruinas mayas construidas con ladrillos de barro cocido.

Alojamiento y bienestar en medio de la naturaleza

La Hacienda La Chonita ofrece alojamiento en cómodas habitaciones rústicas, decoradas con sencillez y buen gusto.

El ambiente es tranquilo, rodeado por sonidos de aves, el murmullo de la vegetación y el aroma del cacao que se seca al sol.

Además, dentro del mismo espacio existe un centro de temazcal y masajes tradicionales, que complementan la experiencia con una dimensión de bienestar físico y espiritual. Este rincón del Edén tabasqueño se ha convertido también en un espacio ideal para retiros, talleres de yoga, actividades terapéuticas y experiencias de conexión con la naturaleza.

Cómo llegar y recomendaciones

La Hacienda La Chonita se encuentra a unos 6 kilómetros del centro de Comalcalco y aproximadamente a 50 minutos en auto desde Villahermosa. Si vienes desde la capital tabasqueña, toma la carretera federal 187 hacia Cunduacán y continúa hasta llegar a Comalcalco.

Desde ahí, sigue rumbo al poblado de Cupilco; al pasar la iglesia, un letrero indica el camino hacia la hacienda. El acceso está bien señalizado y el camino es transitable durante todo el año. Se recomienda llevar ropa ligera, repelente de insectos, calzado cómodo para caminar por los senderos y disposición para aprender y disfrutar de una experiencia auténtica.

Un refugio cultural y natural

La Chonita no es una hacienda de museo ni un parque temático. Es una finca viva, con personas que trabajan la tierra, que conocen el ritmo de los árboles de cacao y que han hecho de la hospitalidad una forma de compartir su herencia. Visitarla es sumergirse en un universo donde el chocolate no es solo un producto, sino una historia contada con aromas, sabores, paisajes y memorias.

Es también una oportunidad para reflexionar sobre la importancia del campo, del conocimiento tradicional y de las prácticas sostenibles en un mundo que busca reconectar con sus raíces.

Así entonces, Hacienda La Chonita es mucho más que una parada turística. Es una puerta de entrada al alma del trópico tabasqueño, donde la tierra, la historia y la cultura se funden en una experiencia que deja huella en todos los sentidos.

Hacienda La Chonita

Comments (0)

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Back To Top